Lunes en Burligton (Lago Champlain)

27 de octubre de 2009

(Quien vea este post que tenga en cuenta que éste es el último de una serie de cuatro posts dedicados a Burlington. Es recomendable leerlos en orden)

Nuestro último día con los Shellito. Al ser lunes todos nos levantamos pronto. Christina al colegio y Mike a trabajar.
Desayunamos y, también como en las películas, el típico autobús de color amarillo vino a buscar a la niña a la puerta de casa acompañada por sus padres y más niños de la zona que poco a poco se iban acercando.

Mike se fue a trabajar pero pudo arreglarlo todo para poder pasar el día con nosotros, al igual que Evelyne.

Así que el lunes por la mañana (de vacaciones todos) nos fuimos a dar un paseo en el ferry que cruza el lago Champlain. El día era precioso y pudimos disfrutar de unas maravillosas vistas.

Aunque algunos parecían que se aburrían.
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Este lago situado en el este de América del Norte hace frontera entre New York y Vermont introduciéndose en Quebec (Canadá). Su superficie de 1.000 km², su longitud de 201 km y su profundidad de 122 m. hace que sea el cuarto lago de agua dulce más grande de Estados Unidos (aquí por menos no se ponen).

El trayecto que realiza este ferry, de unos 20 minutos, no es para nada una atracción turística, si no un medio de transporte para los habitantes de la zona tanto para coches como para camiones. Debido a las dimensiones del lago han de cruzarlo utilizando el ferry si quieren evitarse un montón de kilómetros rodeándolo hasta llegar a algún puente que lo cruce y además pagar peaje.
Las vistas subidos en el Charlotte (Vermont) hasta llegar al pueblo de Essex (NYC).
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Que estarán haciendo los patitos?













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Essex seria un pueblo perfecto para celebrar Halloween. Aunque hay casas muy bonitas, hay tantas en venta que parece que no viva nadie en el pueblo.

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A la vuelta fuimos a comer al cetro de Burlington y luego a recoger las maletas y de vuelta a casa en ese especie de autobús con alas.

La valoración de todo el fin de semana no puede ser más que positivo, buena comida, buenos paseos, buenos paisajes y lo mejor de todo más que buena compañía.

Si todo va bien, nos volveremos a ver en algún momento antes de nuestra vuelta a Barcelona. O bien vendrán ellos a New York o nos acompañaran en nuestro viajecito a San Francisco - La Vegas. Sea como sea, estamos deseando volver a verlos ya que sin ellos este fantástico fin de semana no hubiera sido posible.

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Una vez más gracias por todo.

Los que algún día podáis no dejéis de visitar este fantástico lugar.